Arrojo teatro emerge de la necesidad de encontrarse con la otra persona en mitad de una pandemia global. Surge de la vulnerabilidad de estar en soledad y necesitar a esa otra persona en medio del espacio vacío, más vacío que nunca.
Y el miedo era el monstruo del momento, así que nos pusimos a buscar arrojo.
Lo fuimos sacando de debajo de las piedras, de los árboles, de las miradas ajenas y de los vagones de metro.
Así parimos la compañía de teatro que somos. Y nació en un teatro donde la calle se cuela hasta el escenario: el URBAN